viernes, 18 de marzo de 2011

Pensándolo bien

Estoy convencido. Hay muchas cosas que merecen la pena. Muchísimas. No me refiero a enormes cantidades de dinero, coches de lujo, modernas mansiones o tonterías similares. No. No son esas cosas las verdaderamente importantes, aunque quieran hacérnoslo creer. Lo importante es otra cosa. Pequeños detalles. Grandes alegrías. Aunque a veces nos hace falta un empujón para darnos cuenta, pero sin duda, debemos disfrútarlas más a menudo. Veamos qué se nos ocurre, empiezo yo...

La arena caliente de la playa sobre las plantas de los pies.
El amor de los padres, único e incondicional, más de lo que crees.
Una sonrisa sincera en un día perdido.
Un susurro en el oído que te aleje del vacío.
Los abrazos de verdad, con el cuerpo entero.
El brillo de una mirada enamorada.
Un paisaje sobrecogedor en un viaje en autobús.
Observar el Sol naranja cruzando el horizonte.
Una melodía tocada con sentimiento.
Una canción cantada desde el corazón.
Creerte perdido y encontrar el camino.
La brisa en la cara cuando crees no poder más.
Los amigos que te dicen la verdad.
Aprender a pedir perdón.
Perdonar. Ser perdonado.
Levantarse una vez más cuando te veas vencido.
Una mano que te ayude a ponerte en pie.


... Faltan muchas cosas, demasiadas.

¿Por ejemplo?

2 comentarios:

  1. EN LA SIMPLEZA, A VECES ESTA LA BELLEZA Y LA FELICIDAD....DUSFRUTAR DE UN ABRAZO CALIDO, UNA CONVERSACION LARGA Y SINCERA, UN ATARDECER O LA LLUVIA CAYENDO POR LA VENTANA...OH, SI , SON MUCHAS PEQUEÑAS COSAS QUE LLENAN DE BELLEZA ESTE MUNDO...SALUDOS-.-

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